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El Salto de ayer a hoy, crecido a más no poder. |
El río de El Salto, tantas veces proyectado por nuestras autoridades, es un motivo más para pensr en la separación de nuestra Región Huasteca del Estado de Veracruz y hasta de México, porque los dos niveles de gobierno han hecho caso omiso durante muchísimos años. Se presume incluso que el puente que necesitamos para pasar de Naranjos a Tamiahua ya está hecho y el gobierno estatal ya ha invertido no sé cuántos millones en él. Si sumamos estas tranzas del gobierno las pérdidas de las que hablé anteriormente serían más y lastiman mucho más porque son producto de la corrupción, la cual no ha dejado avanzar a nuestro Estado ni a nuestro País.
Yo en lo personal ya o estoy dispuesto a permitir que como ciudadano del estado de Veracruz y de la República Mexicana se me siga tratando como ciudadano de tercera y se me siga viendo como algo sin importancia, necesito, como miles de huastecos, que se me haga caso, que me tomen en cuenta, que me den mi lugar, porque si no no tiene sentido la pertenencia a una jurisdicción determinada. El puente no es un pretexto para quererme ir, para invitar a los demás a irse, es un motivo para reflexionar sobre el abandono en el que nos tiene el Estado Mexicano y el gobierno estatal de Veracruz, al cual ya no queremos pertenecer ni nos interesa seguir manteniendo para que se roben o desvíen nuestro dinero.
El puente de El Salto es el primer motivo que tengo para apoyar la separación de la Región Huasteca del estado de Veracruz y de la necesidad de un nuevo estado en la República Mexicana. Tal vez sea de los pequeños motivos, pero que afecta severamente a los huastecos que vivimos entre los municipio de Tamiahua y Naranjos-Amatlán.
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